Con el traslado a Miami de los 13 positivos a COVID-19 a bordo de los cruceros Costa Mágica y Costa Favolosa, se pone fin este 26 de marzo a varios días de especulaciones sobre el posible desembarco en Cuba de otra embarcación turística con contagiados por el nuevo coronavirus. En horas de la mañana de este jueves la Guardia Costera de los Estados Unidos anunció que serían sus especialistas quienes los evacuarían.

Según el comunicado de la institución norteamericana, serían realizadas evacuaciones médicas de los enfermos a bordo de ambos barcos, quienes presentan síntomas respiratorios consistentes con neumonía y bronquitis.

Los buques debían permanecer a tres millas de la costa de la ciudad de Miami y abstenerse de cualquier operación de transferencia de personal mientras se preparaban las condiciones para el desembarco de los tripulantes enfermos.

De acuerdo con la nota de prensa, los cruceros transportarían a los miembros de la tripulación a tierra con sus pequeñas embarcaciones. El Cuerpo de Bomberos de Miami-Dade estuvo a cargo de la coordinación y facilitó el transporte de los enfermos a los hospitales locales.

El anuncio de esta solución pone fin a días de angustia y especulaciones sobre la suerte de los miembros de las tripulaciones de ambos buques de recreo.

Sobre el día 23 de marzo comenzó a ser noticia que el Costa Mágica, de la compañía Costa Cruceros que pertenece a Carnival Corporation, se dirigiría, supuestamente, hacia Cuba para desembarcar a su tripulación de alrededor de 970 personas.

La reciente operación de evacuación de los pasajeros del crucero británico MS Braemar por el puerto cubano del Mariel, alimentó las especulaciones sobre la posible repetición de la iniciativa. Sin embargo, ninguna fuente oficial cubana o italiana se pronunció al respecto.

Una parte de los pasajeros del Costa Mágica había desembarcado el 12 de marzo en Martinica, isla caribeña en la que también evacuaron a Hugo Fernando Abril, colombiano de 51 años miembro de la tripulación que había dado positivo hacía varios días y que actualmente se mantiene hospitalizado. El resto de los turistas, entre ellos la francesa Cristina Petrescu, bajó en Guadalupe el día 14 y abordó aviones con destino a sus países de residencia.

Desde entonces, el barco se mantuvo en costas del Caribe a la espera de una solución para evacuar los casos que fueron apareciendo y que requirieron el aislamiento en camarotes individuales.

Las opciones eran buscar un puerto en la zona que permitiera la evacuación o realizar el viaje trasatlántico de regreso a Europa, que toma no menos de 6 días de navegación.

Incluso a los miembros de la tripulación les informaron que atracarían en Cuba. Así lo confirmó a elTOQUE vía WhatsApp Mery M., masajista española que había embarcado días atrás en Barbados.

Aunque algunos medios de comunicación dijeron que a bordo se hallaban 88 positivos a la COVID-19, Mery asegura que según les hicieron saber, dentro del barco solo había cinco enfermos. Otras personas han presentado síntomas, pero no han sido confirmadas. Como medida de precaución, los miembros de la tripulación pasaron a ocupar las habitaciones de los pasajeros y permanecían aislados. “Solo salimos a que nos tomen la temperatura una vez al día”, contó la joven que se encuentra bien de salud y que se ha mantenido en comunicación con su familia.

El crucero Costa Mágica espera junto a otros cruceros turísticos en la costa de Miami, Florida (Imagen tomada del sitio rastreador de cruceros y barcos Cruisemapper).

No está claro aún si la solución de desembarco en Estados Unidos se extenderá al resto de la tripulación de los buques o si, como se ha manejado antes, tendrán que realizar el viaje por mar de regreso hasta el puerto madre de las embarcaciones. Por el momento, Mery M. confirma que las personas sanas continúan a bordo del crucero “con el ancla echada, bien lejos del puerto”. El capitán no les ha dado información sobre lo que seguirá.

Sobre el autor

elTOQUE

El Toque es una plataforma multimedia enfocada en contar a Cuba en su diversidad, compleja, creativa y también a veces dolorosa u oculta.

Sobre el autor

Periodismo de Barrio

Revista digital hecha desde Cuba para ampliar y diversificar la información sobre el impacto del cambio climático en poblaciones vulnerables del país, mediante la producción de investigaciones periodísticas en diferentes formatos y géneros.

Deje un comentario